Las ventajas de la telemática para los vehículos eléctricos

En LeasePlan, estamos convencidos de que los vehículos eléctricos son el futuro de la movilidad. Aunque habitualmente se considera que la sostenibilidad, la eficiencia de costes a largo plazo y la comodidad del conductor son los beneficios más importantes de conducir un VE, no debemos olvidar que estos vehículos gozan también de una la telemática superior. Al fin y al cabo, la telemática proporciona a los gestores de flota una gran cantidad de datos fiables en tiempo real que pueden ayudar a optimizar las operaciones.

«Telemática» es una combinación de dos términos: telecomunicación e informática. Un dispositivo telemático recoge datos de un vehículo y los transmite a un servidor. A partir de ahí, la información puede utilizarse de varias maneras. Imagine que la telemática es la caja negra de un avión. Al igual que un dispositivo que registra los datos de un vuelo, el dispositivo telemático de un VE recopila y registra datos como la velocidad del vehículo, su ubicación, los patrones de aceleración y frenado o el consumo de combustible, el tiempo en reposo y el diagnóstico general del motor. Estos datos pueden ayudar a identificar en tiempo real problemas mecánicos, a prevenir una conducción insegura y a mejorar las operaciones.

La mayoría de los coches modernos llevan incorporada telemática; sin embargo, los vehículos eléctricos pueden producir y monitorear muchos más puntos de datos que los vehículos con motor de combustión interna. Dicho esto, los gestores de flota deberían seleccionar un proveedor de telemática experimentado y supervisar todos los datos de importancia de los VEs que gestionan. De esta forma, se puede lograr una mayor eficiencia y reducir el número de averías y accidentes. Para los gestores de flota que todavía estén en proceso de transición hacia una flota más ecológica, las soluciones telemáticas para vehículos con motor de combustión interna continúan siendo una herramienta útil. Según un estudio reciente de LeasePlan UK, únicamente el 35% de las empresas utilizan la telemática para controlar el rendimiento de su flota. Es una pena, ya que la telemática podría ayudar a los gestores de flota a establecer un plan de transición escalonado. Por ejemplo, la telemática de los vehículos de combustión puede identificar qué vehículos podrían sustituirse por VEs, ayudando así a las empresas a prepararse para el futuro y asegurando su acceso a las ciudades con zonas de exclusión que afecten a los vehículos con motor de combustión interna.

La telemática ofrece a los gestores la información que necesitan para reducir costes y mejorar el rendimiento de la flota. En concreto, la telemática para VEs permite a los gestores de flota:

• Identificar los mejores itinerarios

  Incluso las soluciones telemáticas más básicas para VEs ofrecen mapas actualizados en tiempo real a través del GPS. Proporcionan la ubicación de todos los VEs (así como de activos como remolques) en un mapa digital para que los gestores puedan supervisar toda su flota. Una planificación proactiva de los itinerarios puede ayudar a mitigar la ansiedad por la autonomía, algo especialmente útil los primeros días tras la electrificación. Otra ventaja en tiempo real incluye también el seguimiento del tráfico para evitar atascos y retenciones.

• Planificar los horarios de carga

  Contar con una solución telemática eficaz para VEs puede proporcionar datos en tiempo real sobre la autonomía y el consumo de las baterías, así como sobre otros factores que puedan afectar a la autonomía real, tales como los posibles atascos, la altitud, el clima y la temperatura. La telemática también informa de todas las estaciones de carga disponibles, lo que permite a los conductores seleccionar los mejores itinerarios de viaje, ahorrando así tiempo y costes de energía. Entre las funciones prácticas de los VEs se incluyen las actualizaciones continuas del estado de carga, la posibilidad de decidir las prioridades de recarga en función de los horarios de actividad y el envío de notificaciones a las estaciones de carga a lo largo del trayecto.

• Gestionar los costes de recarga

  Además de señalar la reducción en las emisiones de CO2 que van de la mano con la electrificación de la flota, la telemática de estos vehículos puede ayudar a calcular el ahorro en combustible utilizando los datos de kilometraje y tiempo de inactividad, y sugerir posibles itinerarios alternativos. Reducir el tiempo de inactividad y recargar durante las horas de menor consumo utilizando la comunicación V2G (vehículo a red) son algunas de las formas más óptimas de reducir los costes de recarga.

• Mejorar los comportamientos de conducción

  La telemática para vehículos eléctricos recopila datos sobre el vehículo de forma continua. Entre ellos, nos indica la distancia recorrida, el tiempo empleado, los excesos de velocidad, las averías, los sucesos excepcionales y las advertencias. Además, proporciona información actualizada sobre el estado de mantenimiento del vehículo y las prácticas de conducción inseguras y permite a las compañías de seguros evaluar mejor los niveles de riesgo.

• Anticiparse a los problemas del vehículo

  Los sensores telemáticos de los vehículos pueden proporcionar a los gestores de flota advertencias sobre componentes defectuosos o neumáticos en condiciones de riesgo. De esta manera, el mantenimiento puede planificarse, asegurando la disponibilidad de mecánicos especializados en VEs y de las piezas necesarias para la reparación. Así, el gestor de flota puede sacar partido del mantenimiento predictivo y el ahorro que este conlleva.

En LeasePlan, siempre nos preguntamos qué es lo próximo en materia de movilidad y seguiremos observando los avances en materia de la telemática para VEs.